viernes, 12 de abril de 2024

Unas pocas frases al revés

Últimamente estoy que devoro los libros. Hace mucho tiempo en que tuve una época igual, e incluso llegué a sentirme mal pues, me daba la sensación que perdía mucho el tiempo. Es más que obvio, que ahora no tengo esa impresión, de hecho, ni se me pasa por la cabeza.

Lo qué sí suelo plantearme es sobre qué tema leer. Qué libros o qué géneros escoger, y suelo dilucidar entre muchos temas. Libros como tal, a veces, suelo acabar uno por semana, pero además de eso, me gusta leer todo tipo de reflexiones, opiniones o estudios sobre comportamientos del ser humano. Y el caso, que he encontrado algo por ahí que me ha llamado mucho la atención y que guarda relación con la sociedad en la que estamos ahora metidos.

Estos pensamientos (que son frases), se llaman "el reverso de las cosas", y expongo algunos, pero de todos ellos, me quedo con el último...


Amor propio
Al contrario del amor, el amor propio no acaba.

Mundo
Las recetas para salvar el mundo son bien recibidas por un mundo, que en absoluto las cumple.

Naturaleza
Incluso cuando ruge, la naturaleza es una gran muda.

Nación
La soberanía de las naciones alcanza al espacio aéreo y marítimo; pero no alcanza los corazones de las personas.

Obediencia
[…] La obediencia es una virtud sin placer.

Opinión
No tener opinión es, con frecuencia, la más difícil de las opiniones.

Democracia
La democracia es una forma de gobierno en que el pueblo imagina estar en el poder.


Fuente de Cantos, 12 de abril de 2024. Imagen libre en la red.




viernes, 5 de abril de 2024

Microrrelato; Todo en orden

En los días donde mi estado de ánimo sucumbe, solamente quiero que todo siga en orden. Como cuando mi madre termina de darme un abrazo, que nunca olvida poner otra vez, todas las cosas en su sitio; el mar, las nubes y el sol anaranjado. El aire, ese arco iris que no sé de dónde ha salido; las flores del jarrón, el olor a jazmín, y ese color intenso azul añil del cielo. 

Por favor, quiero que todo quede en orden, como cuando mi madre me abraza...


Marbella, 5 de abril de 2024. Fotografía de Jesús Apa.

  

viernes, 29 de marzo de 2024

Microrrelato; El Paraíso

Mientras en el mundo de los humanos, se discutía en estos días de cómo sería el Paraíso tras dejar la vida terrenal, un gran silencio y súbita quietud sobrecoge la selva. En esa espesura, donde los rayos de sol apenas se filtran entre el dosel de hojas verdes, se desata una danza ancestral.

A un paso del ciervo acorralado, el tigre suspende el salto. Las hienas quedan hieráticas, la pantera abre sus ojos ardientes como si miraran el fuego; cada paso es un susurro en la sinfonía de la naturaleza. El rey de la selva hace lo propio con la muestra de sus afiladas garras, entrenado por generaciones de destreza, escrutando el entorno en busca de su presa.

Sin embargo, el silencio es atronador. En las altas ramas, los monos dejan de chillar, los pájaros guardan sus alas, cosen sus picos. Las hojas ahora, callan su acostumbrado susurro bailando al viento. Nadie camina. Nadie salta. Nadie vuela. Nadie respira y nadie mata. Allí, todos miran al colibrí y la flor copulando. Parece que todos entendieran las distintas formas en las que puede presentarse el amor. Parece que todos saben, que viven en el Paraíso.

Mientras tanto, y más ahora en Semana Santa, en el mundo de los humanos, siguen discutiendo sobre cómo se llega al Paraíso... 


Marbella, 29 de marzo de 2024. Imagen libre en la red.




viernes, 22 de marzo de 2024

Canción triste sobre tu nuca

Siempre paso por tu nuca antes de llegar a tu perfil.

Desde lejos, veo que recuestas tu cabeza en la almohada y tu mirada vaga hacía el horizonte.

Tu cabello revuelto de caobas destellos se desplaza como dios le da a entender, y la nuca, que suministra el closup de tu video se concentra en los quehaceres de la vida.

Tu espalda es paisaje para los besos, te pincho con mi barba y entonces te retuerces.Y aunque primero te quejas, luego acabas sonriendo con esos dientecitos.

Tus hombros son guía para acercarte a mi vientre. Tu barbilla es atracadero de mis pequeños mordiscos.

Siempre recorro tu perfil: aunque a veces lo pierdo de vista y tu nuca, entonces, se convierte en el tintero de mis labios. Te sujeto en brazos porque quiero que veas la vida de frente, y eso me hace perder el sentido.

Lo recobro, y enredo mis dedos en tus pequeños rizos, me acerco a olerte, y no puedo recordar jamás un aroma tan natural y cautivo como el tuyo. Entonces casi enloquezco, y es cuando aprieto tus nalgas y me da por llenártelas de tambores, con golpecitos suaves que no dejan más marcas que las del amor.

Son eslabones de gloria que nos permiten romper la gravedad y tocar el lado oscuro de la luna. Por eso me preocupa tanto darme la vuelta, no sea que tape el sol y te deje sin luz, la que tanto necesitas en todo momento.

Siempre recorro tu perfil y me retiro cuando tus suspiros se vuelven silencios.

Entonces me quedo apenado al darte la espalda, y mientras eres tú quien observa mi nuca, pienso en que pasen pronto los días para regresar a verte de nuevo, mi querida hija, pues no hay nada más triste que el "hasta luego" de un padre...


Fuente de Cantos, 22 de marzo de 2024. Fotografía de Helena Rocha.


viernes, 15 de marzo de 2024

Página de sucesos

Sentada en el rincón de la cafetería que siempre frecuenta, frente a una taza de café, aquella pálida mujer mira a la calle a través del enorme ventanal. El ajetreo de los viandantes en aquella amplia avenida, no enturbia su perdida mirada.

El cielo presenta un gris amargo y el viento acaricia tibiamente los árboles, que se han quedado desnudos por el influjo del otoño inmediato. Los rayos que el sol proyecta en sus pocas oportunidades, aunque tímidos, hacen brillar las hojas color ocre asidas de las ramas. 

Pero la joven no consigue ver el regalo que en horas tempranas le ofrece la naturaleza, aún en aquella pálida mañana; sus ojos color miel están empapados en lágrimas.

En el mismo asiento de todas las mañanas, y con mano temblorosa acaricia la taza de café, sin darse cuenta de que el aromático líquido se ha ido enfriando lentamente. Sobre la mesa, el periódico del día, abierto por la página de sucesos y obituario.


Marbella, 15 de marzo de 2024. Imagen libre en la red.


 


viernes, 8 de marzo de 2024

Las Mujeres con alas

Debo destacar que me siento afortunado con las maravillosas mujeres que forman parte de mi vida. Siempre han tenido un papel clave en mi existencia, y a buen seguro, seguiré admirándolas y respetándolas aún más si cabe y con el paso de los años. Y soy muy agraciado porque cuento con mujeres que tienen en mi vida "el papel" de madre, esposa, hermana, amigas, incluso ahora, con una futura mujer, que es mi hija. ¡No se puede pedir más.!

Hace unos meses, previo al nacimiento de Catarina, en casa habíamos acordado que, por nuestras circunstancias laborales, necesitaríamos ayuda. Una "mano" conocida, que fuera de la mayor confianza posible y pudiera hacerse cargo de cualquier situación con nuestra hija. Y desde un primer momento, mi esposa pensó en la persona que en su niñez cuidó de ella. Pero traer a una persona de Brasil, con toda su vida ya hecha, no iba a ser del todo fácil. Aún así, le hicimos la propuesta a Analia de venir a España y ocupar el papel que, casi cuarenta años atrás, ya le tocó hacerse cargo, pero ahora, con una generación más.

Hace unos meses, previo a la Navidad, hicimos una interesante visita guiada en la parroquia de mi pueblo. Y he de decir que, aunque esa iglesia la conozco como la palma de mi mano, siempre en una nueva visita hay historias desconocidas o que, simplemente antes, le había mostrado menos interés. Basta que tus sentimientos cambien hacia algo, para que tu atención se desvié a temas que ahora consideras mucho más importantes en tu vida.

Carlos, el guía, comenzó su explicación tal que así;

"Tiene nuestra iglesia parroquial tres grandes puertas que la comunican con el exterior: una mira al norte, otra al sur y la tercera, al oeste. Esta última, llamada Puerta del Perdón, hasta la fecha reciente, solo se abría en contadas ocasiones, por ejemplo, para que entrara en el templo la procesión de las palmas del Domingo de Ramos. Toma su nombre del hecho de que, antiguamente, se utilizaba únicamente en tiempo de Cuaresma para entrar por ella a recibir el perdón de los pecados, como preparación de la Semana Santa."

Finalmente, Analia lo dejó todo para venir a España. Su casa, su pareja, amigos y vecinos, pero sobre todo, sus dos hijas y un nieto. Cuando fui a recogerla al aeropuerto, mi primer pensamiento fue el cómo podría compensar el sacrificio que estaba haciendo esta valiente mujer, saliendo de su entorno, viajando por primera vez en su vida fuera de Brasil, para embarcarse en una aventura que, en definitiva, se convertiría en una gran responsabilidad con la llegada de Catarina. No todo el mundo está dispuesto a eso. Merece todos mis respetos.

Carlos, el guía turístico, siguió con su charla enseñándonos la iglesia;

"El nombre de La puerta del Perdón está acreditado documentalmente en el correspondiente libro de Bautismos, que nos dice que en dos ocasiones (1714 y 1715) se encontraron sendos niños abandonados, que fueron bautizados como Benito y María Manuela, en la pila bautismal que hay junto a la puerta.

Durante el transcurso de los años, y aunque ya no fueron anotados en el libro de Bautismo, pero sí en otro registro eclesiástico, han habido numerosos niños los que han sido aquí abandonados, principalmente por madres que no podían sustentarlos. Los dejaban al alba, en un cesto, abrigados y con algún tipo de alimento dentro, como miel o un poco de leche, con la intención que en los primeros compases de la mañana, fueran encontrados por algún alma que se compadeciera de ellos. También se dejaba en la puerta de personas pudientes. A estos niños, se les llamaba "Expósitos". Actualmente, se entregan a los orfanatos."

Ante la explicación de Carlos, busqué la mirada de Analia, que también nos acompañaba en la visita. En muchas ocasiones la observo y veo su mirada perdida, pero esta vez, creo que había un gran brillo en sus ojos. Se trata de una persona muy fuerte, como pocas veces he visto en una mujer, y puedo dar fe, que en cualquier persona el corazón se enternece ante historias como éstas, aunque estaba claro que la vida de Analia lleva dentro emociones tan fuertes como aquellas que escuchábamos.

"De entre las mil interpretaciones que se han dado al término "Expósito" hay una que nos remite al Imperio romano. Allí el paterfamilias, amo absoluto de su casa, podía ejercer el derecho ius exponendi de la potestad patria consistente en sacar de su hogar al hijo no deseado, dejándolo fuera para que muriese o hasta que alguien finalmente lo acogiera. De ahí el origen probable de un término (Ex pósitus, puesto fuera). 

Durante siglos ser un "Expósito" supuso una especie de estigma de por vida cuyo obstáculo no era tan fácil de superar. Al abandono, la vergüenza y la pérdida consiguiente de identidad se sumaba en ocasiones un desprecio social, tan injusto como cruel.

A fin de minimizar los efectos negativos que tal circunstancia pudiera suponer, el monarca Carlos IV decretó la "legitimidad para los efectos civiles de todos los Expósitos del Reino", de manera que a pesar de su origen ilegítimo fueran considerados "como hombres buenos del Estado llano".

Paralelamente, en los propios orfanatos se habilitan fórmulas alternativas como la de poner a los niños el nombre del santo del día, el de la persona que le hubiese encontrado o el de aquella que ejerciera las labores de tutor."

Cuando supe por primera vez de la vida de Analia, que por muchos años ha trabajado con la familia de mi esposa, todos hablaban de ella con un cariño y admiración especial, y no solamente por los buenos cuidados que tuvo hacia ellos. Como digo, Analia lo ha dejado momentáneamente todo para venir a cuidar de Catarina. Ha debido ser muy duro para ella dejar su casa, amistades, familia, su nieto, y sobre todo, a sus hijas... Dani y Paloma, que así se llaman, fueron niñas "Expósitas". Analia, que ayudó en toda la vida de voluntaria en un orfanato, acogió en adopción a estas dos niñas, sus hijas, una de ellas, con apenas 3 horas de vida.

Cuando conocí además la historia de los niños Expósitos, mi admiración hacia ella fue mayor si cabe. Podemos preguntarnos a veces, qué tipo de mujer puede abandonar a su hija en "la Puerta del Perdón", y quiero pensar que tiene que deberse a una causa de fuerza mayor, pero en definitiva un acto quizás de desesperación y que no sabría como llamarlo. Y si los niños abandonados, en la puerta de una iglesia, o en un orfanato, toman el nombre de niños Expósitos, entonces, ¿cómo se llaman aquellas mujeres que los reciben para darles la mejor vida posible?...

No pueden llamarse de otra manera que Ángeles... Por eso, que hoy, en el Día de la Mujer, quiero hacer énfasis en que también hay Mujeres con alas.

¡Feliz día a todas las mujeres!



Analia y Catarina. Marbella, 8 de marzo de 2024. Fotografía de Jesús Apa.




viernes, 1 de marzo de 2024

Microrrelato; dos locos

A veces, una conversación entre locos puede llegar a convertirse en un perfecto y cuerdo diálogo. Los locos suelen hablar de cualquier tema, pues bien es sabido, que la locura carece de ignorancia. Además, casi siempre, tienen salida con todo aquello sobre lo que se discute. 

Uno de los dos locos que conversaban, mirando al cielo, le dijo al otro;

"Las nubes de verano, son pasajeras, así como las grandes pasiones son nubes de verano, el viento las desplaza y en poco tiempo, desaparecen" 

El otro loco, quedó pensativo, y aunque tardó en contestar, le dijo;

-- ¿Ocurre lo mismo con las nubes de otoño? -- Porque tengo entendido, que hay amores que, incluso en contra del viento, jamás se disipan.

"Lo siento, pero ahí no puedo contestarte. Siempre he sido de amores de verano..." 


Fuente de Cantos, 1 de marzo de 2024. Imagen libre en la red.