viernes, 26 de agosto de 2022

El dolor de la Esperanza

Hace unos días escuché a alguien agarrarse a un clavo ardiendo con la palabra Esperanza. Y la repitió varias veces, y le dije que si le gustaba invocar a ese supuesto, y me dijo que no era ningún supuesto, sino que le acercaba a la realidad que él quería.

Yo seguía discrepando, incluso le dije que aferrarse tan fuerte a la Esperanza, la mayoría de las veces, incluso causa dolor. Él no estaba de acuerdo, así que me pidió que le pusiera un ejemplo;  

"Se repetía día tras día; a la vuelta de su monótono trabajo, entra en la casa, deja la cartera, cuelga el abrigo y va a la habitación a desvestirse. Se da una ducha, se pone ropa cómoda y coge un par de botellas de cervezas de la nevera. Se pone a mirar la tele un rato y luego se va al dormitorio. Ocupa su lado de la cama y en una corta lectura de su largo libro, se queda dormido.

A la mañana siguiente, se viste, coge la cartera, se vuelve a poner el abrigo y antes de salir de casa, al igual que viene haciendo a diario durante casi dos años, comprueba que bajo el felpudo, sigue estando la llave que ella dejó..."  


Cabeza la Vaca, 26 de agosto de 2022. Imagen libre en la red.



viernes, 19 de agosto de 2022

La mudanza

Cada vez que hago una mudanza, me doy cuenta de la cantidad de cosas materiales e innecesarias que vamos acopiando con el paso del tiempo. Y resulta que, a veces no te das cuenta de ello si no haces precisamente una ordenación de tus cosas. 

Siempre he admirado aquellas personas que dicen, y con conocimiento de causa, que la "mochila" que llevamos a cuesta, debe ir cargada de experiencia y con muy pocas cosas materiales. Y es verdad, pues a mayor carga en la mochila, mayores responsabilidades. Bueno, mejor corrijo; "mayores preocupaciones".

Y es difícil llevar a cabo esa premisa, pero con el paso del tiempo, es absolutamente necesario ocuparte solo de las cosas importantes e ir dejando a un lado lo material, aquello que solo genera preocupación por mantenerlo en buen estado, porque no te lo roben o por el hecho de que tenga que pertenecerte por el valor económico que te supuso en el pasado.

Por eso quiero volver a leer esa historia que dice que;

-- En el siglo pasado, un turista americano visitó al famoso rabino Chofetz Chaim...

Y se quedó asombrado al ver que la morada del rabino consistía, sencillamente, en una habitación atestada de libros. El único mobiliario lo constituían una cama, una mesa y una banqueta.

- "Rabino, ¿dónde están sus muebles?", preguntó el turista.

- "¿Dónde están los suyos?", replicó el rabino.

- "¿Los míos?", respondió, sorprendido... "pero si yo sólo soy un visitante... estoy aquí de paso", dijo el americano.

- "Yo también", dijo el rabino.--


Marbella, 19 de agosto de 2022. Imagen libre en la red.


viernes, 12 de agosto de 2022

Que lleguen las aguas

No es broma, que llevo varios meses soñando que llegan las aguas...

"En la mañana, aún con el sol, anuncian su llegada. Lo hacen con un primer trueno que llega a sacudir la tierra y eriza las antenas de las hormigas. 

El sol se hace ralo pero reservado, como esas viejas gentes que cuando se van, te miran de soslayo, se acomodan el sombrero bajándolo hasta por debajo de los ojos.

Sueño que llegaron las aguas, con su retahíla de espumas oscuras y, damiselas listas para confeccionarle al cielo, una capa de grises provisional, centellas y lúgubres azules.

Ahhh, y qué pena al despertar!!!. Mi corazón precisa con urgencia un septiembre húmedo para poder gritar pero despierto, que al fin llegaron las aguas..." 


Cabeza la Vaca, 12 de agosto de 2022. Fotografía de Jesús Apa.


viernes, 5 de agosto de 2022

Microcuento; días en vela

Tengo bruxismo y por eso utilizo funda al dormir así que, supongo por ese motivo, despierto desvelado a diario y me pongo caminar por el patio extenso de la casa. Me he sorprendido mirando el cielo y quizás sean los azahares del naranjo que avivan mi vigilia.

No sé qué me pasa, pero cuando regreso a la cama, rumeo con la idea que mi futuro es un desastre. No encuentro mi "sino" y esto me lleva a pensar que, aunque soy distinto a los demás, quizás soy yo quien va en dirección opuesta a mi destino.

Deambulo por el cuarto, tiendo el lecho, lo golpeo para hacerlo confortable y después, cierro ruidosamente mi ataúd. "Menudo vampiro extraño", pienso hasta conciliar el sueño...


Cabeza la Vaca, 5 de agosto de 2022. Imagen libre en la red.