viernes, 29 de diciembre de 2023

El último propósito

Todos los últimos días del año, por una razón que ignoro, despierto de madrugada y me levanto a caminar por el patio extenso de mi casa. En algunas ocasiones me he sorprendido mirando al cielo, y quizás sean las luces de colores, la nostalgia del año que acaba, o tal vez los azahares del naranjo, los que avivan mi vigilia.

No sé qué me pasa, pero cuando regreso a la cama, se me vienen a la cabeza los propósitos incumplidos del año que acaba. Me digo; ya está mi subconsciente martirizándome. ¿Para qué planeo cosas cada año nuevo y que no llevaré a cabo?

Tiendo el lecho, lo golpeo para hacerlo confortable y después, cierro cuidadosamente los ojos pensando en que el próximo año, o sea, mañana, no pensaré en ninguna promesa más, que la de dejarme llevar y vivir intensamente. Pero cierto es, que también hay que vivir con algún objetivo o meta.

Ahí toco mi panza y voy a la cocina. Al menos, he de cumplir con el propósito de acabar la caja de mantecados que aún está por la mitad...


Fuente de Cantos, 29 de diciembre de 2023. Imagen libre en la red.



No hay comentarios:

Publicar un comentario