viernes, 8 de marzo de 2019

La mujer y el gran teatro del mundo

Hoy, 8 de marzo y Día Internacional de la Mujer, dentro de los actos que se celebran para conmemorar dicha efemérides, he sido invitado por un Ayuntamiento a presentar el libro de un amigo. Han sido ya varias veces las que he ayudado a este amigo a hacerlo, pues se trata de una persona con una discapacidad intelectual y que si ya de por sí, escribir un libro tiene un mérito importante, imaginaos. Pero cuando me llamó el alcalde de este pueblo (Bienvenida) para presentar el libro en un día como éste, especial para las mujeres, no pude más que preguntarle; "Pero, ¿qué tiene que ver este libro con el Día de la Mujer?. 

-- Ya te las apañarás --, me contestó irónicamente.

Ni que decir tiene que la mujer ha tenido y siempre va a tener una presencia increíblemente importante en mi vida. En las vidas de todos nosotros; de los hombres. Su papel, es clave y vital en el crecimiento personal de cualquier hombre, le pese a quien le pese. Y esto es así porque nadie cómo ellas para entender, precisamente, la esencia de la vida. Entre otras muchas cosas, porque son las portadoras de ésta. Y aunque ese puede ser su principal papel, pueden adaptarse a otros muchos más.

El libro que presento narra la biografía de Juan Gregorio, una persona que tras atravesar por dolorosos traumas en su infancia y juventud, un día se apuntó a un grupo de teatro y a través de ahí logró superar esos complejos que venía arrastrando desde pequeño, en parte por esa pequeña discapacidad intelectual y emocional. Fue en las distintas obras de teatro e interpretando diferentes papeles, cómo se convirtió en la buena persona que hoy es. 

Nada más lejos de la realidad, la mujer de hoy en día tiene que adaptarse al mundo en que vivimos mejor que nadie. Debe y tiene que hacer multitud de interpretaciones con los diferentes papeles que le va tocando ejercer; la mayoría de ellos con un difícil guión. Así podemos encontrar mujeres que tienen que ser hijas, a la vez que hermanas, compañeras, madres..., también trabajadoras, o luchadoras, valientes, tenaces y por supuesto, siempre sensibles. 

En el siglo XVII, el Siglo de Oro español, Calderón de la Barca (1600–1681), gran escritor, especialmente dramaturgo, en su auto sacramental “El gran teatro del mundo”, asemeja la vida humana a un teatro donde cada persona representa un papel. 

Todos nos pasamos la vida interpretando personajes. Todos tenemos una serie de personajes que usamos en mayor o menor medida. Son versiones diferentes de nosotros mismos. Unas veces usamos unos, y otras usamos otros. Todos vamos pasando por esa variedad de protagonistas con los que vamos "actuando" a lo largo de nuestra vida. Claro que, normalmente hay uno que prevalece y con el que mejor nos sentimos. 

Pero los papeles de una mujer nada tienen que ver con los que hacemos los hombres. Y no es por honrar con estas líneas la celebración de un día como éste (la mujer no lo necesita), sino que es la pura verdad. Ya nos gustaría a nosotros interpretar algún personaje tal y cómo lo hace cualquier mujer...

- La perfeccionista: muy aplicada y exigente que quiere hacerlo todo bien. 

- La guerrera o amazona: fuerte y activa. Tiene mucho genio y ataca cuando la contradicen o le hacen daño. 

- La maga. Hace magia para resolver los problemas de las personas a las que quiere y le importan.

- La rebelde. Creativa, divertida y elocuente, contagiando al resto de todo lo mejor.

- La santa. El perdón forma parte de su carácter, de su alma.

En realidad, ninguna de ellas define a la MUJER en esencia. Esas pueden ser sus distintas facetas. Son roles o personajes que adopta cuando funciona en modo automático, cuando se siente atacada, cuando teme algo o siente la carencia de algo.

Sin embargo, cuando no siente temor, suele estar en paz. Cuando está en paz, se siente bien con ella misma y entonces ocupa su lugar, cualquiera que sea. 

Dice Matt Simons en su canción Catch and Release...(coger y soltar)

Hay un lugar al que voy
en el que nadie me conoce.
No es soledad,
es algo necesario.
Es un lugar que me inventé,
me descubre de qué estoy hecha.
De esas noches que he estado despierta,
contando estrellas y peleando con el sueño.

Somos tan distintos a ellas, que hasta los lugares que inventan, sus soledades o sus propios sueños, son infinitamente más bonitos que los nuestros...

Feliz día y larga vida a todas ellas!!!.


Bienvenida, 8 de marzo de 2019. Imagen libre en la red.


No hay comentarios:

Publicar un comentario